domingo, 22 de mayo de 2011

Control que los familiares deben ejercer.

Desde que el familiar tiene conocimiento de esta enfermedad, la vida le cambia totalmente.
La persona que se implica en la rehabilitación de un ludópata, sin importar el grado de parentesco o de confianza que se tenga con el enfermo, debe asumir varias cosas importantes, entre las que se encuentran tanto la necesidad de información con respecto a la enfermedad como la aceptación de esta; si no se esta dispuest@ a empezar por ahí las cosas van a ir de mal en peor rápidamente, ya que incluso, cumpliendo con estas dos exigencias, el control de una persona adulta de un modo tan estricto como se precisa sobre todo al principio no es tarea fácil ni agradable.
En un principio se les controla prácticamente toda su vida, tanto social, como económica; sin que puedan realizar un gasto de dinero ni de tiempo que no sea justificable mediante su correspondiente ticket o en su caso una explicación suficientemente demostrable o creíble.
Me centro en estas dos cosas porque el ludópata para poder jugar, lo que básicamente necesita es dinero y tiempo para poder jugar. Por lo tanto compadecerse por su situación anímica y no pedirle explicaciones o darle un dinero extra, sobre todo sin control (toma esto para que puedas hacer tal o cual cosa, pero no le digas nada a tu madre) lejos de hacerle un favor, se le esta perjudicando severamente en su rehabilitación, pues el enfermo lo único que tendrá en cuenta la próxima vez, será que en esa persona tiene una puerta abierta para darle rienda suelta a su adición, de la que seguramente no será totalmente consciente.

1 comentario:

  1. Yo no soy familiar, soy un enfermo de ludopatía. Pero me gustaría añadir algo al comentario de paraca, con el que como casi siempre estoy total mente de acuerdo. Yo le diría al familiar, que pueda enfrentarse a esta situación. Que no deje que el enfermo le haga chantaje, de ningún tipo, que no se deje atemorizar por amenazas. Ya que como hemos dicho muchas veces somos como niños pequeños” sin importar la edad que tengamos” y como tal actuamos. Somos muy manipuladores, y tenemos que salirnos siempre con la nuestra. A si que al familiar duro con la enfermedad, y tolerante, en lo posible con el enfermo. Y luchando uno se recupera, y la vida. Tanto personal como familiar, vuelve a los limites normales. Pero antes, hay que luchar un poquito. Un saludo kike

    ResponderEliminar