sábado, 16 de marzo de 2013

Volvemos al eterno debate ¿Quién tiene razón, “YO” y mi soberbia, o todos los demás?


En algunos casos parece que el paso del tiempo en una asociación no sirve de nada, resulta lamentable pero es así. Cuando alguien se obstina en aferrarse a sus ideas y se cierra en banda, es imposible hacerle entrar en razón, da igual las veces que se le digan las cosas y cuanta gente se lo diga, nada importa, tan solo su cabezonería para abrir los ojos y enfrentarse con la dura realidad. Todo lo demás será considerado por esa persona, cómo tonterías sin fundamento de gente que tan solo pretende hacerle la vida imposible.
Lo peor de todo eso es que para defender esa postura cuasi demencial, se llega a atacar a quien se ponga por delante sin ningún miramiento, llegando a extremos que podrían calificarse cómo crueles, ¿Porqué, hay algo más cruel que atacar sin compasión a quien te está apoyando?
Es comprensible que alguien afectado por una terrible adición cómo es el juego, antes de recibir tratamiento alguno pueda mantener una postura cómo esta, pero después de un cierto periodo de tiempo en tratamiento, con bastantes asistencias a terapias, si no ha cambiado su manera de ver y entender las cosas, es indicio de que tan solo ha asistido a ellas para calmar a los demás, pero sin poner verdadera intención de cambio.
Llegado a este punto, tan solo me queda por decir una cosa, ¡Cuánto tiempo perdido y cuanto dolor inútil sufrido! Espero por su propio bien que alguna vez recapaciten seriamente.
Hasta pronto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario